ccs miami jfk / fear factor

Una placida manhana, un jueves post thanksgiving -cortesia de mi amigo Ivan fui invitada a NY a pasar cumpleanhos, navidad, anho nuevo, trabajar, etc, con el y mas-. Levantarse a las 3 am. para hacerse el rollete, embadunarse las caritas que aun nos ponen a valer con las cremas de rigueur, empolvarse nuestras partes mas pudendas y demas hierbas bien aromaticas para situarnos en el mood idoneo y asi entrompar la antigua "trocha"... no es pelo de conejo, como diria mi adoctrinador castizo y siempre extranhado padre. Total que... pelo de conejo.Ya lista para el taxi y temblando por el monto que requeriria el chofer, ignoto para la redactora aqui, me encontraba con maletas cerradas, candados localizados, pasaportes archivados en sobres, divisas entre Bartlebys; por supuesto con unas minimas ganas de no hablar con nadie en el aeropuerto, pero la baja de nicotina me convirtio en Miss Congeniality en Manquetilla, como decia servidora cuando era una infanta -hara unos 30 anhitos de eso-.
"Seat # 17C", es decir, pasos mas atras de primera clase. (NO ME CANSO DE REPETIRLO: CUANDO VIAJAS EN PRIMERA CLASE NECESITAS VIAJAR SIEMPRE EN PRIMERA CLASE, es una cagada, pero una delicia de cagada! Es como ser capaz de follar sentada en un resistente coxis masculino, correrse y seguir haciendolo como si fuera hacer 30 planchas diarias. Viajar en primera es ese tipo de experiencia, ese regalo divino. Y pues una, ya miembro de ese pequenho circulo de bonvivance, confia en ser siempre y por todos consentida. Una semidiosa, superstar, seudo diva (adoro ese calificativo tan penetrante y poco efectivo, por cierto) que embutida en prendas de rebajas, vintage que mi madre no aprecia, tintinea cornucopia y desea que cierta cornucopia nunca vaciara mi cuenco, algo 'a la imperio de los sentidos... pero vuelvo a mi historia.
Al lado de dos rolos bogotanos, 17C, ventana. Saco la revista Marcapaso para leer un articulo acerca de nombres que lucia divertido y oigo: "Senhora Luz Carrascosa acercarse a la puerta del avion o a la puerta de embarque" y pienso: "uy! tengo prohibicion de salida del pais o algo paso o me sentaran en primera, iconho, lo sabia!, justicia divina, el karma, mi regalo de cumpleanhos, una senhal, y pare de contar!
Debo confesar que he sido arrestada, mas no fichada igracias a Ganesh y a un optimo juez! y recientemente. Si bien enamorada de mi genero, domino una suerte de artes no marciales aunque brutales, pero en dos platos y cuando haya que largar un par de ostias bien largadas, a esta chiqui no se le enfria el guarapo. Mi primo querido me tildo de Cleopatra Jones hace mucho. A los once anhos ya conocia lo que era la pelea callejera y por ahi va la cosa.
En la puerta del avion me notifican que una de mis maletas "vibra" y que necesitan conocer los contenidos con detalle. Actuo casual y como una estrella de telenovela vespertina. Arqueo las cejas y enrollo los ojos al cielo: "a ver, a ver, ah!, peliculas, ropa, regalitos, zapatos, que mas, que massssss?" y noto la guapura del agente aduanal o guardia aduanal o aereo o como se denomine el cargo. El caballero me dice que puesto que viajo sola debo bajar a la zona de cargo a mostrar los fulanos "contenidos". Tambien apunta que perdere el vuelo y que me subiran en el proximo. Invoco a la muerte, solicito un regreso a mi camita con mi nueva gatita Catalina y mi perra Perri porque es mejor escapar a ver mas peliculas de coreanas asesinas y voladoras en la casa que someterse a ser arrestada por cualquier detalle comprometedor olvidado descuidadamente en la maleta.
Pero otra parte de mi -que agradezco aunque poco reconozco-, esa resistencia y confidencia de Jackie Brown me hace bajar con el agente quien con extrema galanteria me coloca una chaqueta naranja estilo vest que usan por alli, quien sabe por que.
Una pareja de perros antidrogas posan celosamente ante mi llegada. En un meson metalico esta mi maleta, mi chorizo que no me abandona y que me rompe la espalda. Cuatro guardias nacionales detras del meson me observan y de refilon a los canes al mismo tiempo. La parte de mi, que si conozco bien se enciende a todo vapor: "que tal galanes? que le pasara a mi maleta?", y comienzo a sacar brassieres, medias, zapatos, peliculas y un guardia dice: "aqui esta vibrando senhora", " por donde?" "por aqui, fijese!". Toco y toco, y toco una toalla naranja que envuelve a mi delfin que solito se habia accionado quizas por el calor o el ansia de llegar a mi New York querido.
Al principio me averguenzo un poquitin, pero al ver a los guardias tronchados de la risa y a los perros ladrando con el resultado, comence a reir yo tambien y un fresquito me entro hasta por donde me gusta la cornucopia.
El agente buenmozon me dice: "no se preocupe, no es la primera vez". Supongo que no, claro. Le quito las pilas y santaspascuas. Y mientras me regresa a la sala de espera de la puerta me pregunta: "por que tan grande y con aletas?", "porque es casi una ballena y me gusta" le digo.

el cuarto de veronica
Finalmente me colocan en el proximo vuelo a Miami. Llego alli con retraso, nerviosa por tener que bajar a la correa a buscar las maletas, pero hay que pasar por inmigracion antes. Las colas interminables. Los latinos chorreados. Espanholes por todos lados. Una hora y media mas tarde me llega el turno, tengo 15 minutos para correr a la correa y buscar las maletas. Me toca un hindu, que revisa y revisa mi pasaporte europeo, me relajo, pero se me nota que trato de relajarme y me contraigo. Al fin le pregunto: "todo bien? Namaste!" y dice: "no". Entra otro agente de inmigracion que toma mi pasaporte y el hindu le dice: "a regular one". No hay Cleopatra ni Jackie que valga. Pal cuarto. Rompo en llanto y pido como una bebe ser devuelta a casa, ya sabemos con quienes. Para mi sorpresa es un cuarto repleto de europeos 80%, haitianos 2%, colombianos 3%, venezolanos 15%.
Mucha camaraderia. No se ven tan nerviosos como deberian estarlo. Encuentro 3 lexotanil de 3mg y troglodita los trago. Me subo los pantalones, recuerdo que no me puse la faja, que vaina! he debido usarla por todas estas horas muertas, quien sabe cuanto tiempo pasare aqui. Una colombiana muy simpatica me dice: "calmate mujer, acabas de llegar, pongamonos a conversar". Yo prefiero preguntarle al haitiano a mi lado que por que esta ahi. Muy nervioso me dice que no sabe y que vive en Miami desde hace mucho. Llevaba una caja de Barbancourt de doce botellas. Le digo que si salimos con vida, le compro una. Se rie pero no acepta la oferta. Mas nervios, mas companherismo, mas europeos entran, un cuarteto hindu adorna el cuarto, el puto cuarto. Pienso en Gogol, el chico de la novela de Jumpa Lahiri. Tengo especial predileccion por el gentilicio hindu y fijate un agente de origen hindu me detiene. La canalla de la vida.
Una mujer venezolana que dijo ser periodista, tambien dijo haber pasado 4 horas en espera. Busco mas lexotanil, pero tampoco puedo verme como un guinhapo ante los agentes de inmigracion. Entonces descarto la idea y no induzco la laxitud.
"Miss Carrascosa, window 3, please". El agente dice que todo esta bien pero que debo finiquitar una deuda de $125 con la escuela para evitar futuras invitaciones al cuarto.

pomada pa los dolores
Me colocan en otro vuelo a JFK. Corro a un bar cerca de mi proxima puerta de embarque y me invito a mi misma 5 botellas de cerveza Presidente y a mi lado se sienta un surenho a sacarme conversa y terminamos coincidencialmente hablando del presidente. Me aburro con el senhor surenho que guarda cierto parecido con Clinton y que me cuenta que ha estado en Cuba muchas veces. Se me cruza la idea de que ya he tenido muchas conversaciones de este tipo y quisiera ser de Ulan Bator, por ejemplo.
Me voy a sentar a la puerta y escucho musica en mi CD player. Cambio Gato Barbieri por Alejandro Sanz como quien no quiere la cosa. La enorme mujer a mi lado se mosquea porque canto muy alto quizas y me cambio a otro asiento con dos mas vacios a mi lado. Y sigo: " no es lo mismo ser que estar no es lo mismo estar que quedarse, tampoco quedarse es igual que pararno es lo mismoooooooooooooooooooooooque sepas que hay gente que trata de confundirnossssssss pero tenemos corazón que no es igual,lo sentimos... es distintooooooooooooque a lo mejor me lo merezcopero mi voz no te la vendo puerta, y lo que opinen de nosotros...léeme lo labios, yo no estoy en ventaaaaaaaaaaa" y se me planta al lado una version de Clive Owen con look italiano reconocible a leguas. Y carajo! sera que no voy a ser capaz de cantar en paz?, pero el Clive Owen puede mas que yo y me quito los audifonos y le pregunto si estoy cantando muy alto. iUn zorron, que soy! Me dice: "que cosa ascolta? salsa? Marc Anthony?" y caigo en cuenta de que podria ser el stuntman de Jean Reno pero es mucho mas guapo. Y olvide hablarle de Alejandro Sanz que es mi trovador oficial, filosofo, semiologo, machazo, etc. pero este hibrido de Clive Owen con Reno me dejo con la boca abiertota.
No ahondare en los detalles de la conversacion, pero si les dire que alabo la naturaleza de mis pechos y que mi rostro le recordaba al de una actriz... y decidimos sentarnos juntos en el avion.
Cortesia de mi amiguete Ivan, esta vez iba esta mismisima senhorita en SEAT 7B, en primera. Pero como dice Sanz: "no se trata del lado que quieras estar que estar de un lado o echarte a un lado... vivir es lo más peligroso que tiene la vida" y me dije: "mi trono por un amor, mijita".
Clive Reno, lo llamaremos desde ahora, me llama: "Elena, vieni al 27" y voy corriendo como si fuera un video de Julio Iglesias por el pasilllo del avion al gallinero donde me esperaba mi Clive Reno. Cuanta conversacion! Cuantas historias! No nos dejabamos hablar o parabamos para no interrumpirnos.
Cuando apagan las luces del avion para dormir me dice: "ti arropo?" y le digo que si por favor. Segundos mas tarde dice: "voglio darte un bacino de buona notte". Si claro, dije. Y ya de ahi fue un mezzo high mile club...
Lo espera un amigo italiano taxista de quinientos anhos con un Cadillac y me deposita en casa de mi amigo. "Tengo pomada pá tó los dolores, remedios para toda clase de errores también recetas pá la desilusión".